2010, el Año en que Hicimos Contacto

Roy Sheider en una fotografía de la época en que filmó 2010

Aunque Stanley Kubrick destruyó todos los escenarios de 2001, Odisea en el Espacio, para fortuna de quienes nos quedamos con muchas dudas sobre los significados de esta película preciosista, gracias a 2010, El Año que hicimos Contacto, nos enteramos de que HAL 9000 no era un computador neurótico, suicida, sicótico ni homicida, pero sí los habitantes de la Casa Blanca…¿obviamente?

En la cinta, producida, fotografiada, escrita y dirigida por Peter Hyams, la acción transcurre durante una misión conjunta de científicos y astronautas estadounidenses y soviéticos, quienes tienen que luchar por sobrevivir en su viaje a Europa, mientras en Estados Unidos vuelven a jugar a la guerrita, esta vez disputando Centroamérica.

Las cosas se complican porque esta Europa no es el viejo continente terrestre, sino el satélite planetario de Jupiter en donde según la trama se encuentra un monolito que puede dar la clave de la evolución del hombre sobre la Tierra.

Para mejorar las cosas - y la historia- en "2010..." tendremos la oportunidad de volver a encontrarnos con Dave Bowman, el astronauta de 2001, Odisea en el Espacio, quien vuelve a ser al mismo tiempo el nonato y el anciano aislado, interpretado por Keir Dullea.

2010,El Año que Hicimos Contacto, fue filmada en 1984, 16 años después de la película de Kubrick y 22 años antes de que Helen Mirren, (quien tiene aquí el rol de una comandante soviética) ganara el Oscar a mejor actriz por La Reina.

Encabeza el reparto Roy Sheider, el actor de Tiburón, quien también fue comandante en una serie de submarinos llamada Sea Quest y coreógrafo en All that Jazz.

En 2010 lo encontramos en el papel del doctor Heywood Floyd, un hombre que apenas empieza a encontrar la felicidad en segundas nupcias con una bióloga marina quien, por cierto, tiene un delfín como mascota, y sin embargo debe viajar al espacio porque es la única forma de encontrar la verdad sobre el fracaso de la expedición espacial de 2001.

A diferencia de la visual y musicalmente encantadora 2001..., en 2010... nos encontramos con una historia más comprensible y profundamente optimista, con una fotografía virtuosa, aunque no preciosista como las de la películas de Stanley Kubrick.

Además en 2010, a diferencia de 2001, el Gobierno de Estados Unidos es mejor retratado como en verdad es, codicioso, bélico y oportunista, más que como mecenas de la ciencia y la aeronáutica.

¿Ciencia ficción, con humor y esperanza? ¿Harto de los estereotipos de soviéticos malosos y gringos heróicos? Entonces esta es nuestra recomendación para usted.