Annie Hall. Dos Extraños Amantes

Para mi amiga Alessandra

Escribimos esta nota más de 25 años después del estreno de Annie Hall, película autobiográfica de Woody Allen ¿y qué creen? sigue tan vigente como nunca.

Es una película de culto, ente otras cosas por la aparición de alguien  poco relacionado con el cine, el teórico de la comunicación Marshall Mc Luhanquien aparece detrás de un anuncio en el  vestíbulo de un cine para contradecir a un catedrático  pedante; escena que culmina con  Allen, triunfante,  rompiendo la barrera de la pantalla para conversar con el público como si fuera un teatro y diciéndole algo como ojalá que en la vida real las cosas fueran así.

Esa es una de las múltiples líneas sobre las que se puede abordar la película Dos Extraños Amantes como se le tituló en español, la transposición de realidad y ficción, de lo que se piensa y lo que se dice.

Poca gente sabe que el verdadero apellido de la protagonista es Hall, Diane Hall, así es claro que Diane Hall y Diane Keaton son la misma persona, dentro y fuera del escenario. La relación sentimental entre Hall y Woody Allen es conocida por todos los cinéfilos.

En la película, Dianne acaba por enamorarse de un hombre de su tamaño, alto y apuesto. En la vida real se involucró con un galán cinematográfico de esas características, Warren Beaty.

En 1972 Diane había tenido su primer papel inmortal como la novia de Al Pacino en El Padrino, dos años después trabaja con Allen en Play it Again, Sam, que en México fue conocida como Sueños de un Seductor y más tarde colaboran en  El Dormilón, La Ultima Noche de Boris Grushenko y finalmente en Annie Hall, de 1975.

Algunos dramas notables después -Buscando a Mr Goodbar y Reds-, Keaton vuelve a trabajar con Allen en otra de sus más prodigiosas y nostálgicas películas Manhatan, de 1979 y más tarde en 1987 en otra de las grandes, Radio Days, Días de radio, aunque en esta solo canta, pues la protagonista era la nueva pareja de Allen, Mia Farrow.

Y para que se vea como cine y realidad se translapan, en Annie Hall, Diane Keaton sueña con Frank Sinatra, con  algo relacionado a su miedo a cantar, siente que Sinatra la ahoga, en la vida real Mia Farrow decidió separarse de Sinatra porque este no le permitía actuar.

Para la trivia, Diane Hall, adoptó el apellido de su madre, Keaton, porque ya existía otra Diane Hall, registrada en la Asociación para la Equidad de Actores a la que se unió a principios de la década del 70.

Otra tribia, el American Film Institute tiene una lista con las 100 mejores películas de la historia, Diane Keaton, aparece en más de estas  que ninguna otra actriz.

Al final de Dos Extraños Amantes los créditos aparecen sin música, hay una idea que se queda flotando en el ambiente. Un hombre va al siquiatra y le dice "mi hermano tiene un problema grave, se cree foco". Entonces el terapeuta le dice, bueno y por qué no lo trae a mi consulta, yo puedo ayudarle. - Es que entonces no tendría con que iluminarme.

Las relaciones amorosas son una locura, -concluye Allen- pero las tenemos, porque todos necesitamos de alguien que nos ilumine.